GINEBRA, 19 jun (NNN-ONU) — Un ataque combinado de drones y misiles rusos lanzado durante la noche del 16 al 17 de junio ha dejado al menos 14 civiles muertos y 114 heridos en Kiev, marcando el mayor número de víctimas en la capital ucraniana en casi un año, según reportó la Misión de Observación de los Derechos Humanos de la ONU en Ucrania (HRMMU).
“Anoche, en un ataque a escala nacional, Kiev se llevó la peor parte”, declaró Danielle Bell, directora de la Misión de Observación. “Con al menos 14 civiles fallecidos y más de 100 heridos, este es el ataque más mortífero en Kiev desde julio de 2024”.
De acuerdo con las autoridades locales, Rusia lanzó un total de 440 drones de largo alcance y 32 misiles contra objetivos en Ucrania, de los cuales 175 drones y 14 misiles estaban dirigidos específicamente a Kiev.
El ataque afectó al menos 30 puntos en siete distritos diferentes de la ciudad, incluyendo edificios residenciales e infraestructura civil crítica. Se registraron daños severos en varias zonas urbanas, lo que obligó a evacuar a cientos de personas.
Odesa y Chernihiv también sufren ataques nocturnos
Además de los hechos en Kiev, un civil perdió la vida y otros 19 resultaron heridos en Odesa y la región de Chernihiv, tras nuevos bombardeos nocturnos con armamento de largo alcance.
El coordinador humanitario para Ucrania, Matthias Schmale, condenó enérgicamente los últimos ataques contra zonas pobladas: “Los ucranianos han soportado otra noche de violencia. El pueblo de Ucrania no debería tener que refugiarse noche tras noche. Cada día, la guerra cobra un precio devastador sobre la población civil”.
Schmale señaló que en Odesa, entre otros daños, fueron alcanzados una guardería y un centro especializado para niños con necesidades educativas especiales. “Lugares donde los niños deberían sentirse seguros han sido golpeados”, denunció.
Intensificación de ataques rusos en primeros días de junio
La HRMMU informó que, solo en los primeros 17 días de junio, fuerzas rusas han lanzado al menos 3.340 drones y municiones de largo alcance, junto con 135 misiles, contra múltiples ciudades ucranianas.
Esta cifra supera ampliamente la cantidad utilizada en el mismo periodo de 2024, cuando se contabilizaron 544 proyectiles durante todo el mes.
Este tipo de ofensiva representa un aumento significativo en la frecuencia y letalidad de los ataques nocturnos, muchos de ellos enfocados en áreas densamente pobladas.
El ataque a Kiev fue calificado por Bell como “un ejemplo de la grave amenaza” que suponen estas tácticas militares, que combinan misiles y drones en oleadas simultáneas, causando muerte, miedo y destrucción masiva.
Civiles no deben ser blanco: ONU reitera su llamado
Antes de esta última agresión, ya se habían verificado 29 muertes y 126 heridos en Járkov, Kiev y otras ciudades como resultado de ataques con armas de largo alcance o de escombros caídos tras sus interceptaciones.
Según la actualización mensual de protección civil de la ONU, estos sistemas de ataque están generando un aumento del 50 % en el número de civiles fallecidos o heridos en 2025, en comparación con el mismo período del año anterior.
“Los ataques contra civiles e infraestructuras civiles están prohibidos por el derecho internacional humanitario. Los civiles, incluidos los niños, nunca deben ser un objetivo ”, concluyó Schmale.
Equipos de rescate local, autoridades regionales y trabajadores humanitarios continúan en el lugar, brindando asistencia médica urgente, apoyo psicosocial a familias afectadas y distribuyendo suministros esenciales mientras se evalúan nuevas necesidades.
— NNN-ONU
