WASHINGTON, 3 de septiembre (NNN-AGENCIAS) — Las hospitalizaciones de niños por COVID-19 han llegado a su mayor nivel en Estados Unidos desde que el país comenzó a monitorear los casos pediátricos hace aproximadamente un año, solo la semana pasada se contagiaron unos 204 mil menores.
Hacia finales de agosto, el promedio de admisiones por día bordeaba los 300 casos, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés).
Los médicos advierten que la situación podría empeorar en la medida que las escuelas están iniciando el año escolar y la variante delta, que se ha expandido por el país, se transmite mucho más rápido que las otras.
Y aunque la tasa de mortalidad pediátrica es menor al uno por ciento, el problema más grave, dicen los expertos, son las consecuencias que el virus puede causar en los menores.
Entre ellas, el síndrome inflamatorio multisistémico (PIMS, por sus siglas en inglés, y también conocido como SIMP o MISC-C), que puede dañar el corazón de los niños, así como sus sistemas digestivo, nervioso y respiratorio.
Más de 204 mil niños en Estados Unidos se infectaron con COVID-19 solo la semana pasada, comunicó la Academia Americana de Pediatría preocupada ante la falta de exigencia del uso obligatorio de mascarillas en escuelas.
Con el regreso a las clases presenciales, el número de casos infantiles representaron el 22,4 por ciento del total de contagiados en el país durante los últimos siete días y ascendieron a 500 mil los pequeños enfermos desde el 9 de agosto.
Los menores de 12 años aún no son elegibles para las vacunas, por lo cual los expertos en salud coinciden en que la obligatoriedad del uso de mascarillas es la herramienta más eficaz para frenar las infecciones en los más pequeños durante su estancia en los centros educativos.
Los pacientes aumentan nuevamente en el territorio norteamericano, con lo cual es mayor también la cantidad de hospitalizaciones en todas las edades, dijo la directora de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), la doctora Rochelle Walensky.
Los especialistas culpan a la variante delta del coronavirus SARS-CoV-2 del alza de los contagios y recomiendan el uso de cubrebocas para todos los estudiantes, maestros y personal de apoyo, independientemente del estado de vacunación.
Sin embargo, algunos estados rechazan las medidas preventivas, como Texas y Florida, cuyos gobernadores amenazaron con una reacción violenta contra los distritos que exijan la utilización de mascarillas en instituciones docentes
Estados Unidos reportó más de 210 mil nuevos casos de COVID-19 el miércoles, con lo cual asciende a 166 mil el promedio de la última semana.
Ante ese panorama, la capacidad hospitalaria es restringida, principalmente en Alabama, Georgia, Texas, Florida y Arkansas, donde más del 90 por ciento de las camas destinadas a pacientes graves están ocupadas, indicó un reporte de CNN.
— NNN-AGENCIAS
