BOGOTÁ, 2 de mayo (NNN-AGENCIAS) — El presidente de Colombia, Iván Duque anunció el sábado que sacará al Ejército y otros componentes de las Fuerzas Armadas para controlar y reprimir las masivas protestas en las principales ciudades del país.
Así lo expresó el mandatario colombiano en una declaración desde la sede del gobierno, en la que explicó que se apoyará en la figura de “asistencia militar”, la cual se mantendrá hasta que cesen las manifestaciones en contra de la reforma tributaria.
Duque señaló que la asistencia militar está consagrada en la Constitución y añadió que se mantendrá en coordinación con alcaldes y Gobernadores.
La figura de la Asistencia Militar oculta el intento de militarizar el país para hacer frente a la movilización social en contra del presidente Iván Duque.
El anuncio del mandatario tuvo lugar poco después de que se registraran nuevas manifestaciones en la capital Bogotá, Cali y otras ciudades en el cuarto día de manifestaciones contra la reforma fiscal impulsada por el Gobierno.
En la localidad de Pasto, capital del departamento de Nariño, fronterizo con Ecuador, un grupo de manifestantes derribó la estatua del prócer Antonio Nariño, considerado el Precursor de la Independencia de Colombia.
Organizaciones defensoras de Derechos Humanos y movimientos sociales han denunciado la represión por parte de los organismos de seguridad en contra de los manifestantes.
Organizaciones, movimientos sociales y colectivos políticos continuaron las protestas por cuarto día consecutivo este primero de mayo, Día Internacional de los Trabajadores, en rechazo a la Reforma tributaria dictada por el presidente Iván Duque.
Desde diferentes puntos del país se han mantenido las marchas. En Bogotá los ciudadanos se manifiestan en las calles en repudio a las políticas de represión contra el pueblo colombiano. “Aquí está el pueblo en las calles organizado, luchando por vida digna” expresaron los sectores populares desde la localidad de Bosa.
La organización social Congreso de los Pueblos desde su cuenta en Twitter informó sobre la llegada el sábado de la Minga Indígena a Puerto Resistencia a Cali, uno de los principales puntos de concentración en la capital del departamento del Valle del Cauca.
El Congreso de los Pueblos también precisó que este “primero de mayo en el sur de Bogotá el pueblo sigue en las calles a pesar de la amenaza de la fuerza pública y el gobierno nacional”. La organización denunció represión por parte de la Policía a concentraciones suscitadas en la ciudad de Pereira, situada en el departamento de Risaralda.
“Hacemos un llamado a que brinden garantías para la movilización social. Protestar es un derecho”, apuntó el movimiento social. De igual manera, medios locales dijeron que el Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) sigue reprimiendo la movilización en Barranquilla, violando derechos humanos, impidiendo que las personas ejerzan su derecho a la protesta.
En el Catatumbo se realizan bloqueos y jornadas de pedagogía acerca de la reforma tributaria, rechazan los operativos de erradicación forzada en la región y el retorno de las aspersiones aéreas con glifosato.
De igual manera el pueblo de Popayán, en el Cauca, después de más de 80 años, se moviliza un primero de mayo, contra la reforma tributaria y en rechazo de las políticas de represión del gobierno Duque, según indicó Colombia Informa.
El gobernador de Antioquia, Luis Fernando Suárez Vélez informó del nuevo decreto que rige en dicho departamento colombiano, “el toque de queda pasa de 32 a 9 excepciones (…) solo se permitirá la compra de víveres o productos de primera necesidad a domicilio”, agregó.
Por su parte, el informe presentado el viernes pasado por la Red de Derechos Humanos Francisco Isaías Cifuentes, además de los ocho fallecidos reportados en Cali, el accionar policial ha dejado un saldo de 84 personas conducidas a estaciones de policía, 28 heridos, tres manifestantes desaparecidos, tres personas que perdieron un ojo, así como una mujer abusada sexualmente por un agente del Esmad.
— NNN-AGENCIAS