GINEBRA, 24 de abril (NNN-AGENCIAS) — Los países pobres recibieron el 0,3 por ciento de casi mil millones de dosis de vacunas contra la COVID-19, denunció el viernes Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
El alto ejecutivo aseguró en un artículo en el diario The New York Times que pese al tiempo récord en que la ciencia enfrentó la pandemia, de los más de 890 millones de dosis administradas en el mundo, más del 81 por ciento se usaron en países de renta alta y media-alta.
Ghebreyesus instó a los países ricos a elegir el buen camino pues, expresó, si cumplen sus promesas de vacunas, la pandemia puede terminar.
Los fármacos ayudarían a combatir el flagelo, pero si se riega sólo una parte del infierno, el resto seguirá ardiendo, señaló en referencia a la flexibilización prematura de las medidas de salud pública y la distribución desigual de las dosis.
Aseguró que el Acelerador de Acceso a las Herramientas de COVID-19 (ACT), que incluye la iniciativa de compartir vacunas Covax, se puso en marcha para garantizar una distribución lo más equitativa posible de dosis, diagnósticos y terapias para COVID-19.
Pero muchos de los mismos países ricos que expresaban públicamente su apoyo a Covax estaban paralelamente pre-ordenando las mismas vacunas en las que Covax confiaba, apuntó.
En enero, agregó, lancé un reto global para que la inmunización estuviera en marcha en todos los países en los primeros 100 días del año, y era un objetivo eminentemente alcanzable, pero la cantidad de vacunas entregadas es totalmente insuficiente.
Hasta el jueves, Covax distribuyó 43 millones de dosis de vacunas a 119 países, que cubren apenas el 0,5 por ciento de su población combinada de más de cuatro mil millones de personas.
Aseguró que, desde el nacimiento del Acelerador ACT, hace un año, muchas de las mayores economías del mundo prestaron un fuerte apoyo político y financiero a Covax, pero también lo socavaron de otras maneras.
Un puñado de países ricos se traga el suministro previsto, ya que los fabricantes venden al mejor postor, mientras el resto del mundo se disputa las sobras, puntualizó.
Precisó el directivo de la OMS que la escasez genera inequidad y pone en riesgo la recuperación mundial.
Cuanto más tiempo circule este coronavirus en cualquier lugar, sostuvo, más tiempo se verán perturbados el comercio y los viajes a nivel mundial, y más posibilidades habrá de que surja una variante que haga que las vacunas sean menos eficaces.
Ghebreyesus llamó a los países y las empresas que controlan el suministro mundial a compartir la financiación, que compartan sus dosis con Covax de forma inmediata y sus conocimientos para ampliar de forma urgente y masiva la producción y la distribución equitativa de las vacunas.
En la EMA están “firmemente convencidos” de que es mejor vacunarse que correr el riesgo de terminar hospitalizado o morir por la COVID-19. Foto: DW.
La Agencia Europea del Medicamento (EMA), tras un nuevo análisis, mantiene que los beneficios de la vacuna de AstraZeneca contra el coronavirus superan los riesgos de eventuales coágulos de sangre “muy raros” en adultos de todas las edades.
Según el regulador europeo, la vacuna desarrollada por la farmacéutica AstraZeneca y la Universidad de Oxford está autorizada en la Unión Europea (UE) para prevenir la COVID-19, que puede causar enfermedades graves y la muerte. Además, esta enfermedad puede tener también consecuencias a largo plazo, incluso en personas sanas.
Sin embargo, la EMA se reafirma en que los casos que se han producido de coágulos sanguíneos con niveles muy bajos de plaquetas tras la inoculación, también conocida como trombosis con síndrome de trombocitopenia, son muy raros, tras una revisión de los datos llevada a cabo por el Comité de Medicamentos Humanos (CHMP) de la organización, reportó RT en Español.
La EMA avisa de que este análisis podría cambiar según se disponga de nuevos datos y a medida que evolucione la pandemia y otros factores.
La vacuna de AstraZeneca es eficaz para prevenir hospitalizaciones, ingresos en unidades de cuidados intensivos y muertes. Sus efectos secundarios más comunes (dolor a la palpación en el lugar de infección, dolor de cabeza, fatiga, mialgia y fiebre) suelen ser leves o moderados.
Además, Noël Wathion, director ejecutivo adjunto de la EMA, ha afirmado: “En general, los datos muestran que los beneficios de la vacunación aumentan con la edad y con niveles elevados de infección en la comunidad”.
Los efectos secundarios más graves son casos muy raros de coágulos sanguíneos inusuales con plaquetas bajas, que se estima que ocurren en una de cada 100.000 personas vacunadas.
El Comité recomienda continuar inoculando la segunda dosis de la vacuna entre 4 y 12 semanas después de la primera.
El CHMP también ha considerado otras recomendaciones, como administrar la segunda dosis tras un intervalo más largo, no administrar segunda dosis o administrar una segunda dosis de otra vacuna.
Sin embargo, el organismo no ha podido determinar si el riesgo de esos coágulos raros después de una segunda dosis será diferente o igual al existente con la primera dosis, debido a la falta de exposición y tiempo.
— NNN-AGENCIAS