SEÚL, 14 sep (NNN-TELESUR) — El ministro del Trabajo surcoreano, Kim Yong-hoon, condenó el trato recibido por sus conciudadanos detenidos en una redada migratoria en Georgia, EE.UU., calificándolo de “shock” nacional.

“Ni siquiera los prisioneros de guerra serían tratados así”, afirmó, tras ver imágenes de trabajadores coreanos encadenados por agentes de ICE.
La redada ocurrió en obras de una planta de baterías eléctricas de Hyundai-LG cerca de Savannah.
Un vuelo con más de 300 trabajadores surcoreanos llegó a Seúl tras una semana de negociaciones diplomáticas.
El presidente Lee Jae-myung advirtió que el incidente podría desalentar futuras inversiones directas de empresas surcoreanas en EE.UU.
El gobierno de Seúl negocia con Washington mejoras en regulaciones de visado, incluyendo nuevas categorías para trabajadores especializados.
— NNN-TELESUR
