KUALA LUMPUR, 8 jul (NNN-BERNAMA) — La histórica aspiración de la ASEAN por establecer una Zona de Paz, Libertad y Neutralidad (ZOPFAN) ha recuperado impulso gracias al respaldo de China y Rusia para adherirse al Protocolo del Tratado de Zona Libre de Armas Nucleares en el Sudeste Asiático (SEANWFZ, por sus siglas en inglés).
El profesor Dr. Zainal Abidin Sanusi, docente del Departamento de Ciencia Política y Estudios Madani de la Universidad Internacional Islámica de Malasia (IIUM), señaló que este nuevo dinamismo refleja el compromiso renovado de ASEAN con la visión de ZOPFAN, equilibrando seguridad, sostenibilidad y crecimiento inclusivo para las futuras generaciones.
“El apoyo de China y Rusia demuestra que ZOPFAN no es solo un discurso histórico, sino un marco en evolución que sigue siendo profundamente relevante en el actual panorama estratégico”, indicó Sanusi antes del inicio de la 58ª Reunión de Ministros de Asuntos Exteriores de ASEAN (AMM) y eventos relacionados que se celebran esta semana en Kuala Lumpur.
La ZOPFAN, firmada el 27 de noviembre de 1971 por los países miembros de ASEAN en Kuala Lumpur, tenía como objetivo mantener la región del Sudeste Asiático libre de intervención de potencias extranjeras, reforzando así la autonomía regional durante la Guerra Fría.
Sanusi destacó que este desarrollo podría aumentar la credibilidad internacional del Protocolo SEANWFZ e incrementar la presión diplomática sobre otras Potencias con Armas Nucleares (NWS), especialmente Estados Unidos, Reino Unido y Francia, para reconsiderar sus reservas hacia el tratado.
“La política exterior neutral y principista de Malasia le otorga credibilidad para actuar como un mediador confiable en estas complejas negociaciones”, añadió, señalando también que este cambio refleja una transformación más amplia en la postura diplomática de ASEAN.
“Esto marca un momento clave en lo que algunos llaman ‘diplomacia de sostenibilidad’, un enfoque renovado de paz y seguridad centrado en la cooperación a largo plazo en protección ambiental, crecimiento verde y desarrollo inclusivo, más allá de las estrategias puramente militares o geopolíticas”, explicó.
Pese al estatus de Zona Libre de Armas Nucleares en ASEAN, Sanusi advirtió que la región sigue siendo vulnerable ante despliegues de capacidades nucleares por parte de potencias externas.
“Los líderes de ASEAN consideran hoy más urgente que nunca asegurar el apoyo universal de las NWS, para proteger el espíritu de ZOPFAN y salvaguardar la estabilidad y prosperidad del Sudeste Asiático”, sostuvo.
También subrayó que el compromiso de ASEAN con un Sudeste Asiático libre de armas nucleares no solo ha fortalecido la seguridad regional, sino que también ha contribuido al crecimiento económico sostenible, demostrando cómo el desarme puede formar parte de una estrategia más amplia de diplomacia ambiental.
Sanusi propuso que ASEAN impulse la creación de un mecanismo regional de cumplimiento y monitoreo, en colaboración con la Agencia Internacional de Energía Atómica (IAEA), basado en el modelo de la Comisión de la Zona Africana Libre de Armas Nucleares, para mejorar la transparencia y construir confianza entre los estados involucrados.
Además, recordó que la protección ambiental forma parte fundamental del SEANWFZ, ya que el tratado prohíbe expresamente el vertido de desechos radiactivos y limita estrictamente las actividades nucleares, reforzando así la justicia intergeneracional y la salud de los ecosistemas regionales.
“La presidencia malasia en ASEAN 2025 bajo el lema ‘Inclusividad y Sostenibilidad’ se alinea perfectamente con las preocupaciones globales actuales, como el cambio climático, el desarrollo equitativo y la paz, ayudando además a vincular SEANWFZ con cuestiones más amplias de medio ambiente y justicia social”, afirmó.
Indicó que Malasia ha trabajado arduamente detrás de escena a través de comités y canales diplomáticos de ASEAN para garantizar logística eficiente y debates enfocados, especialmente en temas sensibles como el monitoreo y cumplimiento del tratado.
“Malasia puede aprovechar su liderazgo en tecnologías verdes, energía limpia y crecimiento económico equitativo para demostrar cómo una diplomacia basada en la sostenibilidad puede moldear la construcción de paz de manera más integral”, concluyó.
Este enfoque, dijo, diferencia a la ASEAN actual de encuentros anteriores, donde seguridad y desarrollo solían abordarse por separado. Ahora, Malasia está ayudando al bloque a pensar de forma transversal, combinando paz y sostenibilidad de nuevas maneras.
Sanusi destacó que el liderazgo malasio podría convertir la AMM en un hito no solo en materia de paz y desnuclearización, sino también en la consolidación de la diplomacia de sostenibilidad como un enfoque definitorio de los esfuerzos de ASEAN para equilibrar geopolítica, medio ambiente y desarrollo.
La 58ª Reunión de Ministros de Asuntos Exteriores de ASEAN y eventos asociados, programada del 8 al 11 de julio, espera recibir a unos 1,500 delegados, incluidos ministros de relaciones exteriores de ASEAN, Timor-Leste, socios del bloque, participantes del Foro Regional de ASEAN (ARF), socios sectoriales y altos funcionarios del Secretariado de ASEAN.
Malasia acoge el evento en el marco de su quinta Presidencia en ASEAN, después de haberlo hecho previamente en 1977, 1997, 2005 y 2015.
— NNN-BERNAMA