NUEVA YORK, 4 mar (NNN-CUBADEBATE) — El número de niños que no tienen acceso a servicios de protección social aumenta cada año y ya alcanza a 1460 millones, advirtió un informe presentado el pasado miércoles por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).

Solo entre 2016 y 2020 se sumaron 50 millones de niños entre cero y 15 años a los que no recibieron prestaciones básicas de protección social, en particular las prestaciones por hijos a cargo, pagadas en efectivo o a través de créditos fiscales.
El informe, con el título de “Más de mil millones de razones: La necesidad urgente de construir una protección social universal para los niños”, subraya que la carencia de esa protección expone a los niños a sufrir pobreza, hambre y discriminación.
Shahra Razavi, directora del Departamento de Protección Social de la OIT, dijo que “garantizar una inversión adecuada en protección social universal para los niños, idealmente a través de las prestaciones universales por hijos a cargo para apoyar a las familias en todo momento, es una decisión ética y racional”.
Según el informe, las tasas de cobertura de las prestaciones familiares y por hijos a cargo disminuyeron o se estancaron en todas las regiones del mundo entre 2016 y 2020.
Eso significa que no se está en la vía de lograr una amplia cobertura de protección social de aquí a 2030, de acuerdo con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) fijados por las Naciones Unidas.
Por ejemplo, en el ODS1, Fin de la Pobreza, la meta 1.3 propone “poner en práctica a nivel nacional sistemas y medidas apropiadas de protección social para todos y, para 2030, lograr una amplia cobertura de los pobres y los más vulnerables”.
Pero, por contraste, la cobertura cae en la mayoría de las regiones del mundo. En América Latina y el Caribe la cobertura disminuyó de manera significativa, de 51 a 42 %, mientras que en otras regiones se estancó o sigue siendo baja.
Desde 2016 la tasa de cobertura en Asia central y Asia meridional se sitúa en 21 %; en Asia oriental y Asia sudoriental en 14 %; en África subsahariana, en 11 %; y en Asia occidental y África del Norte, en 28 %.
Cuando no reciben una protección social adecuada, los niños y las niñas están más expuestos a la pobreza, las enfermedades, la falta de escolarización y la malnutrición, y tienen más probabilidades de caer en las redes del matrimonio precoz y el trabajo infantil, expuso el informe.
En el mundo, “los niños tienen el doble de probabilidades que los adultos de vivir en la pobreza extrema, aquellos que luchan por sobrevivir con menos de 1,90 dólares al día, aproximadamente 356 millones de niños”, reza el informe.
La cifra de 1,90 dólares diarios de ingreso como umbral de la pobreza extrema ya fue extendida por el Banco Mundial a 2,15 dólares, considerando la paridad de poder adquisitivo o relación entre el poder de compra de bienes entre distintos países.
El texto recuerda también que 1000 millones de niños viven en situación de pobreza multidimensional o, lo que es lo mismo, carecen de acceso a la educación, la salud, la vivienda, la nutrición, el saneamiento o el agua.
El número de niños que viven en situación de pobreza multidimensional aumentó en 15 % durante la pandemia de COVID-19, lo cual supuso un retroceso en los avances que se habían conseguido hasta 2019 en la reducción de la pobreza infantil, y subrayó la necesidad urgente de otorgarles protección social.
La pandemia puso en evidencia que la protección social es una respuesta fundamental en tiempos de crisis.
— NNN-CUBADEBATE