WASHINGTON, 16 de abril (NNN-AGENCIAS) — El incremento se produce entre otros factores por el sostenido aumento de los costos de los fertilizantes tras las acciones punitivas decretadas Estados Unidos y aliados occidentales contra Rusia, indicó el sitio digital nakedcapitalism.com.
Los precios de los alimentos en América Latina se incrementaran más, entre otros factores, por el continuado incremento de los costos de los fertilizantes tras las acciones punitivas decretadas Estados Unidos y aliados occidentales contra Rusia, indicó el sitio digital nakedcapitalism.com.
Rusia, como es sabido, es el mayor exportador de fertilizantes del mundo. Estas exportaciones se están viendo afectadas por el aumento de los precios de la energía, las sanciones occidentales y la decisión del gobierno ruso, a mediados de marzo, de no exportar una serie de productos, incluidos los fertilizantes, a los llamados países “hostiles”, señaló la publicación, incluso países como Perú que no están en la lista de “enemigos” se vieron gravemente afectados.
La mayoría de las naciones de América Latina, apuntó , dependen en gran medida de la importación de fertilizantes rusos y se niegan a unirse a la guerra económica que impulsa Washington y las naciones europeas contra Moscú.
Según Statista, los fertilizantes nitrogenados, potásicos y mixtos juntos representaron casi el 40 % de todas las importaciones latinoamericanas de Rusia en 2019. Otras clave son el acero semiacabado
(15 %) y la gasolina (12 %).
Subrayó nakedcapitalism.com. que los precios más altos y la escasez prolongada de fertilizantes rusos podrían tener un impacto severo en la agricultura de la región, que ya está sufriendo una espiral de costos de insumos. Si los fertilizantes de esa nación dejan de llegar a la región, el resultado será un aumento de los precios de los alimentos en el futuro inmediato.
Como informa Quartz, Brasil, cuya economía ya está sumida en una recesión estanflacionaria, es el mayor importador de fertilizantes del mundo:
Su principal proveedor es Rusia, que proporciona al gigante suramericano el 22 por ciento de sus importaciones. En octubre de 2021, se restringieron las exportaciones de fertilizantes rusos por temor a una escasez. La menor oferta de exportación provocó un aumento de los precios. De hecho, justo antes de la invasión, las autoridades brasileñas estaban en Rusia tratando de negociar un acuerdo. Ahora, con la guerra y las sanciones, es posible que los compradores de brasileños tengan que buscar en otra parte.
El tipo de fertilizante que importa Brasil es una mezcla de nitrógeno, fósforo y potasio conocida como NPK. Los agricultores confían en el potasio para prevenir enfermedades en sus campos; y se utiliza para cultivar soja, café y entre otros. La soja es la mayor fuente de ingresos del pais, la mayor parte de la cual se destina a China, y la escasez podría revertir los recientes avances en el crecimiento de la relación.
Para capear el temporal, Brasil la mayor economía de Latinoamérica negocia para tratar de obtener más potasa de Bielorrusia, lo que es más fácil de decir que de hacer, dado que esa nación también está sujeta a sanciones de Estados Unidos. Tal y como informó Bloomberg el 6 de abril, una forma de sortear este enigma sería que Bielorrusia vendiera potasa al mercado ruso, lo que podría impulsar a las empresas a exportar más:
Pero a día de hoy, los rusos no pueden exportar cantidades considerables, según el analista de CRU Group Humphrey Knight. Incluso en medio de toda esa angustia, se están reservando lentamente algunos buques para sacar fertilizantes hacia Brasil, pero los volúmenes son pequeños y los compradores no están revelando detalles. Rusia ha limitado las ventas de sus nutrientes en el extranjero y muchos puertos y compañías navieras se resisten a aceptar sus fletes.
Docenas de barcos rusos cargados de fertilizantes se dirigen a Brasil, con un último barco que descargará el 5 de mayo, según los analistas de StoneX. Después de eso, nadie sabe de dónde se abastecerá los brasileños, que importa el 85 por ciento del fertilizante que necesita, ya que la guerra interrumpe los envíos de Rusia, el principal proveedor, señalo la publicación.
Otro afectado por la crisis en Ucrania es Colombia que recibe una quinta parte de todos los fertilizantes utilizados y Argentina que recibe el 15 por ciento del producto ruso.
También México que utilizó casi un tercio de las necesidades de fertilizantes de Rusia en el primer trimestre de 2021 y su carencia influirá en los precios. Por ejemplo, algunos productores de los estados de Puebla y Guanajuato están reportando aumentos de precios de hasta 300 por ciento, informa Forbes México.
Según un documento publicado por la Organización Panamericana de la Salud en noviembre de 2021, los precios de los alimentos empezaron a subir mucho antes de la pandemia y han aumentado más del 18 por ciento de la media en los países de latinoamérica desde enero de 2020.
“Hay que decirlo alto y claro: América Latina y el Caribe se enfrenta a una situación crítica en materia de seguridad alimentaria”, dijo Julio Verdegué, Representante Regional de la FAO, en 2021. Ha habido un aumento de casi el 79 por ciento en el número de personas que viven con hambre desde 2014 hasta 2020″.
Para 2022, las simulaciones de la FAO proyectan dos posibles escenarios. El primero prevé un aumento del ocho por ciento en el precio del trigo. El segundo escenario, más severo, prevé un aumento del 21 por ciento en el precio de todos los cereales, dejando a 13 millones de personas más en condiciones de hambruna en América Latina.
Esta situación de los alimentos y el incremento de sus precios en Latinoamérica repercutirán en un aumento de la inestabilidad política y en las explosiones sociales, concluyó Nakedcapitalism.com.
— NNN-AGENCIAS
