SÍDNEY, 2 de noviembre (NNN-ANDINA) — Australia, que aplicó uno de los cierres de fronteras más estrictos del mundo contra la COVID-19, autoriza desde el lunes la entrada y salida del país a sus ciudadanos y residentes permanentes vacunados contra el virus, lo que permitirá el regreso de miles de nacionales en el extranjero.
La reapertura parcial de fronteras, que el país cerró en marzo de 2020 y que prohibía a sus propios ciudadanos abandonar el territorio nacional, comenzó desde el lunes en Sídney, capital de Nueva Gales del Sur, y Melbourne, capital de Victoria, mientras que aún tendrá que esperar en el resto de jurisdicciones que conforma el país.
Estas dos ciudades, las más pobladas de Australia y que aglutinan alrededor del 40 % del total de 25 millones de habitantes del país, llega después de que alcanzaran la marca del 80 % de la vacunación completa de la población objetivo.
Desde temprano, centenares de ciudadanos y residentes permanentes australianos, así como sus familiares cercanos, muchos de ellos sin poder entrar a Australia durante los casi 600 días que duró este aislamiento del mundo, fueron los protagonistas de emotivas escenas en el aeropuerto de Sídney.
La reapertura también autoriza a los australianos y residentes a viajar fuera del país, a través de Sidney y Melbourne, por primera vez desde que fuera declara la pandemia, si bien antes había un puñado de excepciones de salida.
— NNN-ANDINA
