ISLAMABAD, 12 de junio (NNN-AGENCIAS) — Una provincia de Pakistán dijo el viernes que bloqueará los teléfonos móviles de las personas que se nieguen a recibir la inmunización contra la COVID-19, última medida para penalizar a los no vacunados en un país donde solo una fracción de la población ha recibido el fármaco.
Se produce después de que la provincia de Sindh anunciara que los funcionarios públicos que se niegan a inyectarse no recibirán pago a partir de julio.
Una tercera ola de infecciones ha comenzado en Pakistán después de semanas de duras restricciones, y en Punjab, la provincia más poblada del país que incluye la megaciudad de Lahore, la demanda se ha desacelerado.
“Al principio, esto era solo una propuesta, pero la gente ha dudado mucho en vacunarse, por lo que se tomó la decisión”, informó Hammad Raza, portavoz del departamento de salud primaria de Punjab. La agencia estatal de telecomunicaciones decidirá cómo implementar la medida.
El despliegue de vacunación en todo el país se ha incrementado en las últimas semanas con más de 200 000 dosis administradas la mayoría de los días, pero representa solo una fracción de los 220 millones de habitantes.
Se han administrado casi 10,5 millones de dosis, y China suministra la mayoría de las vacunas.
Pero las preocupaciones sobre los efectos secundarios del jab, junto con la información errónea de que causa infertilidad o muerte en dos años, han provocado dudas sobre la vacuna.
“El nivel de educación de Pakistán es bajo. La gente también está difundiendo rumores e información errónea sobre las vacunas”, dijo a la AFP Salman Haseeb, director de la Asociación de Jóvenes Médicos de ese país.
“Así que las campañas de información del gobierno no funcionarán a corto plazo. Tendrán que hacer uso de la ley para garantizar que todos se vacunen”.
Las medidas fueron recibidas con preocupación por algunos paquistaníes en Lahore. “Será difícil para mí si no puedo usar mi teléfono, pero estoy muy asustado por la vacuna”, dijo Saima Bibi, una trabajadora doméstica en Lahore.
“No se puede obligar a alguien a vacunarse”, agregó Farwa Hussain, una maestra en Rawalpindi, que ya recibió una.
— NNN-AGENCIAS