PRETORIA, 29 de diciembre (NNN-PRENSA LATINA) — El presidente de Sudáfrica, Cyril Ramaphosa, decretó el lunes el aumento de las restricciones socio-sanitarias, al implantar el nivel de alerta tres (de cinco), en un intento por frenar la segunda ola de COVID-19 que afecta al país.
Por recomendación del Consejo Nacional de Comando del Coronavirus, y después de consultar con las gobernaciones provinciales y los alcaldes metropolitanos, el Gabinete ha decidido colocar al país en un nivel de alerta tres, desde el actual nivel uno, con efecto inmediato, dijo en alocución televisada.
Además, reveló, varias de las regulaciones se están fortaleciendo para limitar aún más el potencial de transmisión del nuevo coronavirus, mientras se hace todo lo posible para mantener abierta la economía.
Para dar este paso, argumentó, existen cuatro razones principales.
A saber, queremos minimizar aún más el riesgo de eventos de superpropagación. A medida que aumenta el número de personas con infecciones activas, existe un mayor peligro de que un infectado sin síntomas esté presente en una reunión y propague el virus.
En segundo lugar, planteó reducir las interacciones inseguras (desde el punto de vista sanitario) entre personas.
En tercer lugar, queremos aumentar la implementación de nuestras cinco medidas de prevención clave: distanciamiento social, mascarillas, higiene de manos, control de síntomas y pruebas de laboratorio, detalló el mandatario.
El cuarto objetivo es reducir la carga sobre los servicios de atención médica para que los recursos puedan dirigirse a satisfacer las necesidades del combate a la COVID-19.
En su intervención, Ramaphosa dijo que todas las reuniones en interiores y exteriores estarán prohibidas durante 14 días, excepto para los funerales, aunque a ellos no podrán asistir más de 50 personas simultáneamente.
Además, el actual toque de queda nocturno se extenderá de las 21:00 hora local a las 06:00.
Las regulaciones anunciadas incluyen también la prohibición de distribución, venta y consumo de bebidas alcohólicas en lugares públicos,
Estas disposiciones, sostuvo Ramaphosa, vigentes hasta el venidero 15 de enero, pueden revisarse en las próximas semanas si se observa una disminución sostenida de las infecciones y las admisiones hospitalarias.
Finalmente, anunció, las regulaciones de Nivel 3 ajustadas mantendrán la economía abierta mientras fortalecen las medidas para reducir la transmisión.
Con algunas excepciones, las empresas pueden seguir funcionando siempre que se cumplan todos los protocolos de salud y las medidas de distanciamiento social pertinentes.
— NNN-PRENSA LATINA
