GAZA, 28 nov (NNN-HISPANTV) – La maquinaria de muerte israelí cobró el jueves seis nuevas víctimas palestinas cuando soldados sionistas abrieron fuego contra civiles que intentaban cruzar las llamadas líneas amarillas en la Franja de Gaza.

Este incidente constituye la más reciente de al menos 500 violaciones documentadas al acuerdo de tregua, permitiendo al régimen de Tel Aviv mantener su campaña genocida mediante ejecuciones selectivas.
Fuentes médicas en los campamentos de Al-Maghazi y Bani Suheila en Jan Yunis confirmaron la recepción de múltiples cuerpos mutilados y decenas de heridos críticos.
Testigos presenciales relataron cómo las fuerzas israelíes han comenzado a modificar arbitrariamente la ubicación de las ‘líneas amarillas’ en diferentes sectores de la ciudad de Gaza.
Estos límites teóricos se han transformado en trampas mortales improvisadas donde los palestinos son ejecutados sumariamente bajo el pretexto de violar restricciones de movimiento que cambian caprichosamente.
El Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS) emitió un comunicado de condena enérgica donde expuso documentación detallada sobre la persecución sistemática de combatientes asediados en los túneles de Rafah.
El documento revela cómo fuerzas especiales israelíes continúan con asesinatos extrajudiciales y detenciones ilegales a pesar del alto al fuego vigente.
HAMAS calificó estas acciones como “evidencia concluyente de la determinación sionista por sabotear todos los esfuerzos de estabilización” en la región.
Durante el último mes, el movimiento había coordinado extensamente con mediadores internacionales y el gobierno estadounidense para garantizar el regreso seguro de sus miembros.
Todas las propuestas presentadas fueron sistemáticamente obstruidas por Israel, que optó por continuar con “asesinatos premeditados, crímenes de guerra, persecución ilegal y arrestos arbitrarios”.
— NNN-HISPANTV
