JARTUM, 23 oct (NNN-UNIS) — Más de un millón de personas han regresado a Jartum entre noviembre de 2024 y septiembre de 2025, desafiando la devastación de una ciudad que ha perdido casi todo: hospitales, escuelas, agua y electricidad.

La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) calificó el retorno como “una señal de resiliencia y una advertencia”: las personas vuelven a casas destruidas, sin servicios, y a una ciudad que aún alberga a 3,77 millones de desplazados.
“Conocimos a quienes regresan a una ciudad aún marcada por el conflicto —dijo Ugochi Daniels, directora de Operaciones de la OIM—. Sus viviendas están dañadas, los servicios apenas funcionan”.
De los más de 10 millones de desplazados por la guerra entre el ejército y las Fuerzas de Apoyo Rápido, solo una cuarta parte ha regresado a Jartum. Otros 2,7 millones podrían volver si las condiciones mejoran.
Sin embargo, la crisis humanitaria persiste: brotes de cólera, dengue y malaria se propagan por la falta de agua potable y atención médica. Al menos la mitad de los retornados son niños.
En El Fasher, capital de Darfur del Norte, más de un millón de personas siguen atrapadas bajo bombardeos indiscriminados, con informes de civiles recogiendo alimento animal para sobrevivir. Entre el 15 y el 20 de octubre, más de 13.000 personas huyeron hacia zonas más seguras.
La OIM urgió a las partes en conflicto a “silenciar las armas”, y a la comunidad internacional a invertir urgentemente en agua, salud y protección, para que el regreso no sea una ilusión, sino un verdadero comienzo.
— NNN-UNIS