WASHINGTON, 1 oct (NNN-UNIS) — Los frágiles sistemas de atención primaria en América Latina y el Caribe ponen en riesgo tanto vidas humanas como la estabilidad económica ante futuras crisis sanitarias, advierte un informe conjunto del Banco Mundial, la Comisión Lancet Américas y la Organización Panamericana de la Salud (OPS).

El estudio proyecta que si una crisis reduce entre un 25 % y un 50 % los servicios de atención primaria durante uno a cinco años, la región podría enfrentar hasta 165.000 muertes evitables y pérdidas económicas de entre 7.000 y 37.000 millones de dólares.
“Sin sistemas resilientes, la próxima crisis golpeará con mayor fuerza a las comunidades más pobres”, advirtió el doctor Jarbas Barbosa, director de la OPS.
El informe detalla: hasta 11.300 muertes maternas, 10.000 infantiles y más de 149.000 por enfermedades no transmisibles, además de 14 millones de embarazos no planificados.
Durante la pandemia, la región, con solo el 8,5 % de la población mundial, concentró el 30 % de las muertes globales por COVID-19.
La Comisión propone cinco ejes de acción: expandir modelos equitativos de atención, integrar funciones de salud pública, empoderar a las comunidades, fortalecer la colaboración intersectorial y garantizar financiamiento sostenible.
El informe es una alerta: transformar los sistemas de salud es clave para proteger el desarrollo económico y humano en una región vulnerable a crisis sanitarias y climáticas.
— NNN-UNIS