KINSHASA, 7 jun (NNN-PRENSA LATINA) — El coordinador humanitario de la República Democrática del Congo (RDC), Bruno Lemarquis, alertó sobre la grave situación que enfrentan los siete millones de desplazados internos en el país, mientras otros 28 millones viven en condiciones de inseguridad alimentaria.
Lemarquis expresó profunda preocupación por la insuficiente ayuda internacional para atender a las poblaciones afectadas por múltiples crisis, destacando que muchos programas de asistencia se han visto obligados a paralizar sus actividades.
En declaraciones a Radio Okapi, señaló que la suspensión de las contribuciones de Estados Unidos a los esfuerzos humanitarios ha tenido un impacto significativo en la capacidad operativa del sistema de ayuda.
“El sistema está haciendo todo lo posible por estar al lado de las comunidades afectadas, a pesar de las dificultades actuales, especialmente la falta de financiamiento”, indicó Lemarquis.
Destacó que “cada vez que voy al terreno, veo cómo las organizaciones luchan por mantener servicios esenciales como salud y agua potable”.
El coordinador señaló también que el sistema humanitario mantiene la esperanza de que el acuerdo alcanzado entre la RDC y Ruanda el 27 de junio en Washington conduzca a una reducción real de la violencia y permita el retorno a la normalidad.
“Los humanitarios, como todos los demás, esperamos que este acuerdo dé frutos. La mejor manera de reducir las necesidades humanitarias es silenciar las armas, restablecer la paz, permitir que la gente regrese a sus tierras y que los niños puedan ir a la escuela”, concluyó.
— NNN-PRENSA LATINA
