SANÁ, 20 may (NNN-TELESUR) — Amnistía Internacional (AI) ha exigido una investigación sobre el bombardeo realizado por Estados Unidos contra un centro de detención de migrantes en la provincia de Saada, noroeste de Yemen, ocurrido el pasado 28 de abril. Según la organización, este ataque podría constituir una violación del derecho internacional humanitario y, potencialmente, un crimen de guerra.
Mediante un informe, AI reveló que el bombardeo impactó un complejo penitenciario “bien conocido” en Saada, donde se encontraban cientos de migrantes detenidos por los hutíes. El ataque afectó tanto el edificio principal como un anexo, causando un elevado número de víctimas mortales y heridos.
Fuentes cercanas a la comunidad migrante en Yemen, citadas por AI, confirmaron que visitaron hospitales como el Hospital Republicano y el Hospital General de Al Talh, en Saada, donde observaron al menos “más de una veintena” de migrantes etíopes con amputaciones y fracturas graves. Además, personal del Comité Internacional de la Cruz Roja señaló que las morgues de los hospitales locales se quedaron sin espacio debido al alto número de fallecidos.
Los expertos en armas de AI analizaron fotografías de los restos y determinaron que se utilizaron al menos dos bombas guiadas de pequeño diámetro GBU-39 de 113 kilos.
La secretaria general de AI, Agnès Callamard, condenó el ataque y expresó serias preocupaciones sobre si Estados Unidos cumplió con sus obligaciones bajo el derecho internacional humanitario, especialmente en lo relacionado con la distinción entre objetivos militares y civiles.
AI recordó que, según el derecho internacional, las fuerzas atacantes tienen la obligación de verificar los objetivos, evitar daños a civiles y cancelar ataques en caso de duda. Además, subrayó que, si se confirman daños a la población civil, las víctimas y sus familias deben recibir reparación integral.
— NNN-TELESUR
